Peras al vermouth
- Beatriz
- 21 abr 2020
- 2 Min. de lectura
Mi afición al vino/cerveza no es ningún secreto, pero quizás sí sorprende si se tiene en cuenta el hecho de que en mi casa (prácticamente) no se bebe alcohol - a excepción de algún vermouth que se toma mi madre de vez en cuando. Es por eso que las botellas de alcohol que les van regalando a mis padres, o bien acaban en mis manos, o bien se suelen acumular en la despensa o en la improvisada bodega bajo las escaleras. El número de las que se quedan allí -que no son pocas- no merma a menos que les haga una visita y me ponga a cocinar con ellas, como en esta ocasión. Me gusta la idea de algunos cocineros de comer lo líquido o beber lo sólido...y esta receta sería algo así como la versión comestible del vino caliente, tan reconfortante en los fríos días de invierno. Además, es una receta muy sencilla para la que se necesitan muy pocos ingredientes, lo único importante para conseguir un buen resultado es que las peras no estén muy maduras, y estar pendiente de su cocición.
Ingredientes (2 p):
2 peras firmes
500 ml de vermouth blanco o tinto
100 gr azúcar
1 rama de canela
1 piel de naranja
Especias variadas (al gusto): clavo, anis, jengibre, nuez moscada, pimienta,..
(opcional: crema inglesa)
100 ml leche
1 yema de huevo
1 cucharada de azúcar
Piel de naranja/canela/vainilla
(opcional: helado)
Material:
Para esta elaboración necesitaréis: una cacerola alta con tapa, un pelador/puntilla, varillas (crema inglesa)
Elaboración (40 min):
En una cacerola, poner a calentar a fuego medio-alto el vermouth con las especias.
Pelar las peras, quitarles la base y conservar el tallo.
Una vez que la mezcla empiece a hervir, introducir las peras (tienen que estar de pie) y bajar el fuego. Tapar y cocinar unos 20 minutos, regando las peras con el líquido de vez en cuando.
Sacar las peras de la cacerola y dejar reducir el vermouth hasta que adquiera la consistencia de un caramelo. También se puede añadir un poco de mantequilla y nata para obtener un toffee de vermouth.
Para la crema inglesa:
calentar la leche con la piel de naranja a fuego medio hasta que rompa a hervir. Retirar del fuego y dejar infusionar unos minutos.
Batir la yema con el azúcar con unas varillas, hasta que se forme un poco de espuma.
Verter la leche infusionada sobre la mezcla de yema+azúcar poco a poco, removiendo con las varillas.
Colocar en la cacerola de nuevo a fuego medio, removiendo con las varillas hasta que alcance unos 85ºC, momento en el cual se irán quedando las marcas de las varillas en la crema. Retirar del fuego y enfriar la cacerola en un recipiente con agua fría.
Me encanta el contraste frío-caliente en los platos, por eso recomiendo acompañar con una bola de helado (de vainilla o de algún sabor que contraste como jengibre, menta, regaliz,...) o con la crema inglesa bien fría. En este caso, verter un poco de la crema inglesa sobre un plato semi-hondo, colocar la pera encima y regar con el caramelo de vermouth. Para beber, creo que la mezcla dulce-dulce puede saturar el paladar, por lo que me decantaría por un digestivo/infusión a base de hierbas o un café que tenga la acidez más pronunciada (uno de Colombia podría ser una buena opción) .
Comments